Ícono representativo de San Miguel de Allende
Una de las parroquias más fotografiadas de la República Mexicana.
Ubicada en el costado sur del zócalo, junto a lo que fue el mercado Aldama.
Se construyó casi al tiempo en que se funda la Villa de San Miguel el Grande (hoy San Miguel de Allende) en 1555.
En 1649 sufrió un derrumbe tras un terrible deterioro. Entre 1680, la iglesia se encontraba nuevamente casi en ruinas por lo que se pone en marcha un proyecto arquitectónico de restauración en el que para 1683, bajo el mando del arquitecto Marco Antonio Sobrarías y siguiendo los parámetros y normas del estilo barroco de la época, se había concluido ya el cuerpo principal, le faltaba la torre y el retablo del altar mayor. Esta restauración culminó en 1709.
Para 1880 un cantero local, Zeferino Gutiérrez construyó una fachada nueva inspirada en las grandes obras arquitectónicas de estilo Gótico de la Europa Medieval. Se transformó la portada, los nichos, la ventana coral, el atrio, la torre campanario del reloj y los altares del interior.
Restan una capilla diseñada por Francisco Eduardo Tresguerras en 1786 y la cripta, que el emperador Maximiliano calificó como “tumba digna de reyes”.
En el baptisterio se bautizaron los héroes de la Independencia Ignacio Allende y los hermanos Juan e Ignacio Aldama.